Hoy vamos a contarte qué es un albacea testamentario. Este tipo de conceptos son muy importantes para comprender mejor el mundo jurídico y más concretamente el de las herencias.
Después de explicarte las últimas novedades sobre el Impuesto de Sucesiones 2020, ahora te contamos qué es un albacea testamentario, para qué sirve este cargo, cómo se adjudica, cómo renunciar a él y si tiene algún coste.
Qué es un albacea testamentario
Cuando fallece el testador se tiene que hacer la partición de la herencia, correspondiendo a los herederos. Se pueden dar diversas circunstancias que pueden dificultar la partición, por ejemplo, haber incapacitados, por tener intereses contrapuestos, y otras circunstancias que puedan dificultar la ejecución de la partición hereditaria.
En previsión de las mismas y de las circunstancias que se puedan dar, en testamento se puede designar a la persona o personas de la confianza del testador que velarán para cumplir la última voluntad de la ejecución de su testamento, solidaria o conjuntamente.
En Sentencias del Tribunal Supremo se define al Albacea como el ejecutor de la última voluntad del causante expresada en testamento.
El artículo 898 del Código Civil se define el albaceazgo como:
«un cargo voluntario, y se entenderá aceptado por el nombrado para desempeñarlo si no se excusa dentro de los seis días siguientes a aquél en que tenga noticia de su nombramiento, o, si éste le era ya conocido, dentro de los seis días siguientes en que supo su muerte del testador».
El albacea, a quien el testador no haya fijado plazo, deberá cumplir el encargo dentro de un año, contado desde su aceptación, o desde que terminen los litigios que se promovieren sobre su validez o nulidad del testamento o de algunas de sus disposiciones. No obstante, es muy habitual, en previsión de retrasos por la complejidad que puede ser la partición, el de prorrogar el plazo por el testador en un plazo determinado.
No obstante, si, transcurrida la prórroga, no se hubiese todavía cumplido la voluntad del testador, podrá el Juez conceder otra por el tiempo que fuese necesario, atendiendo a las circunstancias del caso. También los herederos y legatarios podrán, de común acuerdo, prorrogar el plazo del albaceazgo por el tiempo que crean necesario; pero, si el acuerdo fuese sólo por mayoría, la prorroga no podrá exceder de un año.
Se termina el cargo de albaceazgo por muerte, imposibilidad, renuncia o remoción del albacea, y por el lapso del término señalado por el testador, por la ley y, en su caso, por los interesados.
Cómo renunciar al albaceazgo
La excusa puede hacerse por escrito privado a los herederos y en su defecto ante el Juez. Si la excusa no se realiza en tal plazo, el albaceazgo se entenderá aceptado, no siendo una aceptación tácita, ya que se entiende que es una aceptación por ministerio de la ley.
El albacea que acepta el cargo se constituye en la obligación de desempeñarlo, pero lo podrá renunciar alegando causa justa al prudente arbitrio del Juez.
El cargo de albacea es de carácter personalísimo, por ser un encargo de confianza, y, por consiguiente, no puede delegar el cargo si no tuviese expresa autorización del testador.
En el caso que el albacea o albaceas designados no acepten los cargos, corresponden a los herederos la ejecución de la voluntad del testador.
¿Tiene coste ser albacea testamentario?
El albaceazgo es un cargo gratuito. Podrá, sin embargo, el testador señalar a los albaceas la remuneración que tenga por conveniente, todo sin perjuicio del derecho que les asista para cobrar lo que les corresponda por los trabajos de partición u otros facultativos. Si el testador lega o señala conjuntamente a los albaceas alguna retribución, la parte de los que no admitan el cargo acrecerá a los que lo desempeñen.
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